Entre las numerosas plantas utilizadas en las prácticas herbales tradicionales, el cardo mariano destaca por su singular apariencia y su arraigado uso cultural. Esta planta, conocida científicamente como Silybum marianum , ha sido reconocida durante siglos y suele asociarse con rutinas de bienestar basadas en plantas.
Este artículo ofrece una descripción general de qué es el cardo mariano y sus características vegetales.

Conociendo el cardo mariano
El cardo mariano pertenece a la familia de las asteráceas, la misma familia botánica que las margaritas, las alcachofas y los girasoles. Originario de la región mediterránea, crece actualmente en climas templados de todo el mundo. A menudo prospera en suelos secos y rocosos, y es conocido por su resistencia y rápido crecimiento.
La planta se reconoce por sus hojas verdes y espinosas con venas blancas, característica que le dio nombre, ya que las marcas se asemejan a la leche derramada. Produce una flor de color púrpura brillante que se asienta sobre un tallo afilado, similar al de un cardo. Esta llamativa apariencia la hace fácil de identificar en entornos naturales o jardines cultivados.
Las semillas: la parte más utilizada del cardo mariano
Aunque se puede cosechar toda la planta, las semillas son las que se utilizan con mayor frecuencia. Estas semillas contienen un complejo natural llamado silimarina , compuesto por varios flavonolignanos, compuestos vegetales que forman parte de la química protectora de la semilla.
Las semillas se suelen cosechar una vez finalizada la floración y secas las cabezuelas. Posteriormente, se procesan en diversas presentaciones, como polvos y extractos, para su uso en cápsulas, tinturas u otras preparaciones complementarias.

Una planta histórica con relevancia moderna
El cardo mariano se menciona en textos herbolarios tradicionales europeos y de Oriente Medio desde hace siglos. Ha formado parte de tradiciones herbolarias asociadas con el conocimiento botánico transmitido de generación en generación. Sus semillas, hojas y flores han desempeñado un papel importante en preparaciones herbales a lo largo del tiempo.
Este uso histórico continúa dando forma al interés en la planta hoy en día, particularmente en el contexto de la suplementación de toda la planta y la exploración de compuestos derivados naturalmente.
Qué contiene el cardo mariano
Además de la silimarina, las semillas de cardo mariano contienen pequeñas cantidades de compuestos naturales como vitamina E, ácidos grasos y polifenoles . Estos se encuentran comúnmente en muchas semillas comestibles y contribuyen a la composición de la planta.
Interés continuo en el cardo mariano
El cardo mariano sigue siendo un tema de exploración en los campos de la botánica y la fitoterapia. Su uso a largo plazo y su composición química siguen impulsando estudios y análisis. El interés por esta planta se centra en su papel en las prácticas herbarias tradicionales, así como en las formulaciones modernas de suplementos.
Reflexiones finales
El cardo mariano es una planta vibrante y espinosa con profundas raíces en la herbolaria tradicional y una presencia constante en las rutinas de bienestar modernas. Con sus flores de color púrpura intenso y hojas con nervaduras lechosas, es tan visualmente único como reconocido culturalmente. Hoy en día, sus semillas siguen siendo la parte más utilizada, ofreciendo una fuente de compuestos vegetales naturales que siguen despertando curiosidad.
Como siempre, consulte con su médico antes de tomar cualquier suplemento. Busque consejo profesional si cree que podría necesitar algún suplemento de cardo mariano o si ya lo está tomando para asegurarse de no excederse en la dosis necesaria.